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Ante un mercado laboral altamente competitivo, en el que cada vez hay más demanda de jóvenes con estudios superiores, muchos de ellos, esperan realizar sus prácticas a través de convenios con la universidad, ó bien incorporarse en una empresa como becarios, teniendo por tanto, que participar en procesos de selección y afrontar por vez primera, el realizar una entrevista de trabajo, con nervios, ignorando que les van a preguntar, ó como tienen que comportarse ante el seleccionador.
Algunas de las claves a tener en cuenta, para afrontar con éxito tus primeras entrevistas de selección son las siguientes:
1. Buscar información sobre la empresa, antes de acudir a la entrevista, ya que te permitirá poder hacer preguntas al seleccionador de aquellos aspectos que te interesen o tengas dudas.
2.Leer bien la oferta de trabajo, las funciones descritas y los requisitos que demandan para el puesto, para poder prepararte posibles cuestiones sobre tu experiencia, tus motivaciones, tus expectativas, tus competencias, etc.
3.En toda entrevista, la primera impresión es importante; el apretón de manos, la indumentaria (siempre cuidada, puesto que tiene que inspirar confianza y seriedad al seleccionador), el acudir puntualmente, llevar una copia del cv como guía para tus explicaciones, sentarse en una buena postura ( ni demasiado rígida ni relajada), no apoyarnos en la mesa, ni invadir el espacio del entrevistador, argumentar de forma clara, cuidando la extensión de tus respuestas (evitar responder con monosílabos) incluso sonreír alguna vez, para empatizar con el entrevistador. Lo importante es ser natural, mostrarse como es uno mismo.
4. Dejar que el entrevistador inicie el diálogo, escuchar atentamente las preguntas que nos ha formulado, para contestar correctamente, pensando bien las respuesta pero sin hacer pausas largas.
5. Realizar alguna pregunta sobre el puesto a cubrir, condiciones de trabajo, etc.
6.No es aconsejable hablar de la cuestión salarial, es mejor dejar que el entrevistador aborde este tema; si no ha salido durante la entrevista, preguntarlo al final, nunca al principio de la entrevista.
7.Ser positivo al exponer la formación y experiencia
8. Conocer bien tus competencias, tus habilidades, tanto las que son fuertes como las débiles, siempre con el propósito de continuar mejorándolas.
9.Dejar patente en definitiva, que el puesto nos interesa y que nos vemos capacitados para desempeñarlo.
No olvidemos que lo primero que cualquier seleccionador tiene cuenta, es la actitud de la persona y su motivación por el puesto y la empresa. Tener formación, idiomas y experiencia, son fundamentales, pero cada vez en mayor medida, se valora poseer una buena capacidad de adaptación y flexibilidad, especialmente en grandes organizaciones donde los entornos son cambiantes; tener iniciativa, ser proactivo y capaz de trabajar en equipo, son competencias igualmente muy demandas.
Autora: Silvia Sarrà, Consultora de Selección